Pleito litigado por Atanasio de Ayala y Rojas con el concejo de Orduña y múltiples vecinos de dicha ciudad, sobre la indemnización y la devolución del solar que ocupó la fortaleza de Orduña, con su huerta, sus anejos, así como todos los bienes, armas y pertrechos que allí había, después de haber sido destruida en tiempo de las Comunidades por los vecinos de Orduña.
El pleito se enmarca en los procesos judiciales que se interpusieron al concluir el conflicto de las Comunidades, orientados mayoritariamente a restituir sus propiedades.
El conde de Salvatierra manifestó su apoyo al bando comunero por lo que el condestable de Castilla, leal al rey, ordenó a los vasallos del conde de Salvatierra que se alzasen contra su señor y que destruyeran la fortaleza de Orduña, que fue quemada, aunque no destruida en su totalidad.
Con el fin de la guerra el conde de Salvatierra fue condenado a muerte y sus señoríos desarticulados, y fue su hijo, Atanasio de Ayala y Rojas quien en 1528 litigó contra el concejo de Orduña y algunos vecinos para recuperar el solar del castillo.